miércoles, 6 de febrero de 2013

"La mujer sabia edifica su casa; Mas la necia con sus manos la derriba". Prov 14:1

Mirando las cosas más allá del significado literal, que por cierto es verdadero, debemos ver y entender lo que nos quiere decir y enseñar el Espíritu Santo con este proverbio, en el sentido espiritual que es de donde procede la vida y el propósito de todo. Y es lo que Dios nos quiere enseñar, por medio de su Palabra.

La mujer, en primer lugar representa la iglesia; (yo creo que esto ya lo conocemos y no es nada nuevo); pero analicemos desde esa perspectiva, que es la del propósito de Dios.
La sabiduría procede de Dios, su principio está dado por el temor de Dios y Cristo es la Sabiduría de Dios; es Cristo mismo la sabiduría.
Edificar es construir, Dios nos quiere edificar como templos para El.
La casa somos nosotros, ya que somos llamados a ser casa de Dios.

Entonces, como dice el proverbio:

La iglesia de Cristo se edifica y construye para Dios, esto es la iglesia verdadera y creyente. La característica de esta mujer es la sabiduría, la característica de esta iglesia es Cristo, la sabiduría.


¿Y cual es el resultado? La edificación de la casa de la mujer; es decir, la edificación de la iglesia. Lo que hoy muchas otras iglesias están tratando de hacer con sus propias manos y en necedad, es decir, en incredulidad, y sólo logran destruir su casa.

Ahora veamos la segunda parte, en detalle:

Necio es quien no cree en Dios, quien no confía en el Señor; necio es el incrédulo.

"Dice el necio en su corazón: No hay Dios. Se han corrompido, hacen obras abominables; No hay quien haga el bien" Salmo 14:1

¿Como dirá la segunda parte del proverbio?:

La iglesia incrédula, con sus manos derriba la casa de Dios, es decir, se destruye a sí misma.
Incrédula no necesariamente significa que no crea que exista Dios; sino que no le cree a Dios y no confia en su palabra; y es por ello que confia más en sus manos, es decir, en sus obras que en la fe del Hijo de Dios.

Notemos que en esta segunda parte está añadida la palabra "manos", es decir, con sus manos es el medio por el cual la iglesia insensata se destruye (con sus obras). No lo dice así con la iglesia de Cristo, pues esta sabe que el que edifica es Dios y no ella. Más la incrédula, cómo no le cree a Dios; hace la obra de edificación y sólo logra destrucción. La iglesia necia, no es guiada por el Espíritu Santo; sino es guiada por la sabiduría humana, carnal y diabólica.

Hermanos, permitamos que Dios nos edifique para templo santo para El. Recordemos que todo lo que nosotros construyamos sobre este cimiento que es Cristo mismo, será probado por el fuego; y el fuego probará la obra de cada uno de nosotros. Permitamos que Dios edifique sobre este fundamento que está en nuestros corazones que es Cristo; y Dios edificará oro, plata y piedras preciosas; y no añadamos obras de nuestra naturaleza humana que son madera, heno y hojarascas, las cuales no pasaran la hora de la prueba. Pues el fuego las revelará. Que Dios permita por medio de su Hijo que hoy se empiece a quemar todo lo que tenemos edificado y no procede de El; recordemos que Pedro declaró "Porque es tiempo de que el juicio comience por la casa de Dios; y si primero comienza por nosotros, ¿cuál será el fin de aquellos que no obedecen al evangelio de Dios?" 1Pedro 4:17 De manera que es muy bueno que hoy mismo empiece este juicio sobre su casa (que somos nosotros), para que desechemos y se queme hoy todo lo que no aprovecha; y no suframos gran pérdida el día en que ya no hay tiempo (no digo que nos condenemos, sino que suframos pérdida de nuestro trabajo, y no podamos recibir galardón completo).
"Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo. Y si sobre este fundamento alguno edificare oro, plata, piedras preciosas, madera, heno, hojarasca, la obra de cada uno se hará manifiesta; porque el día la declarará, pues por el fuego será revelada; y la obra de cada uno cuál sea, el fuego la probará. Si permaneciere la obra de alguno que sobreedificó, recibirá recompensa. Si la obra de alguno se quemare, él sufrirá pérdida, si bien él mismo será salvo, aunque así como por fuego. 16 ¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros?"1cor3:11-15

Recordemos por último: "Si Jehová no edificare la casa, En vano trabajan los que la edifican; Si Jehová no guardare la ciudad, En vano vela la guardia." Salmo 127:1
Saludos a todos; y que el Espíritu Santo nos revele estás cosas. Amén.

No hay comentarios:

Publicar un comentario